Orar por todo

by Pastor Paul M. Sadler

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“No te preocupes por nada; antes bien, sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias” (Filipenses 4:6).

Dios quiere que oremos por todo, ya sea de naturaleza espiritual o física. En vista del hecho de que Dios nos ha bendecido con todas las bendiciones espirituales hoy, ciertamente estamos de acuerdo en que nuestra vida de oración debe centrarse principalmente en cosas espirituales, como orar por las almas perdidas, una comprensión más completa de las Escrituras, un conocimiento de la voluntad de Dios, sabiduría, etc. Aquí nuevamente, sin embargo, debemos tener presente la importancia del equilibrio en las cosas del Señor. Dios también quiere que demos a conocer nuestras peticiones físicas.

Pablo oró por su enfermedad física, no una, sino tres veces (2 Corintios 12:7-9). Antes de su encarcelamiento en Cesarea, el apóstol pidió que pudiera tener un próspero viaje a Roma; es decir, libres de penalidades (Rom. 1:9,10). Debemos orar por los gobernantes terrenales para que podamos llevar una vida tranquila y pacífica para promover la causa de Cristo (1 Timoteo 2:1-3). Pablo nos instruye a no ser un pueblo desagradecido, como lo fue Israel en el pasado; en consecuencia, debemos dar gracias en cada comida por las abundantes bendiciones de Dios (1 Timoteo 4:4,5). También debemos orar por las circunstancias en las que nos podamos encontrar. Como hemos señalado, Pablo pedía las oraciones de los de Filipos para que pronto fuera liberado de su celda en la prisión de Roma. El apóstol le escribe a Filemón en esta misma línea: “Pero además, prepárame también alojamiento, porque espero que por vuestras oraciones os seré concedido.” (Filipenses 1:22).